La transcreación

La comunicación evoluciona. Los lenguajes, que son entidades vivas, reaccionan a los cambios de la sociedad a la que sirven de vehículo comunicativo y se van adaptando a las necesidades de esta.

Con la entrada de la tecnología en la vida cotidiana y la creación de las redes sociales han aparecido nuevos sistemas y nuevas formas que, a su vez, han obligado a los profesionales a transformarse para dar respuesta a esos novedosos tipos de comunicación.

El concepto general de transcreación podría definirse como el proceso de trasladar el contenido de un mensaje centrándose en mantener el propósito, la intención o el estilo, aunque para ello haya que alejarse del contenido o texto original. La búsqueda de nuevas formas de marketing dio como resultado la aparición de esta idea durante los años noventa.

Esta forma de encarar la transmisión de un mensaje ya se utiliza, con sus particularidades por supuesto, en determinadas formas de interpretación oral o de traducción que deben traspasar un mensaje entre idiomas/culturas muy diferentes, en las que el mantenimiento de la forma del mensaje no permite que este sea totalmente comprensible una vez volcado a la lengua final.

En esta ocasión vamos a centrarnos en la transcreación para material de marketing. Como decíamos, esas nuevas tecnologías y esa presencia de las mismas en la forma en que nos relacionamos con el entorno ha obligado a las empresas y a todos aquellos que hacen uso de la publicidad a plantearse nuevas formas de acceder al cliente-usuario. La globalización les impone la necesidad de procurar la adaptación de la marca de mercado y de generar copias para la comunicación multicultural.

Quizá haya quien piense que no hay diferencias entre la traducción de marketing y la transcreación, pero existen. Esta última supera a la primera en cuanto a la libertad para cambiar el mensaje. No solo podemos prescindir de la exactitud textual, sino que podemos alterar la forma totalmente. Lo importante no es el contenido y su literalidad, lo que interesa es la marca, que los objetivos de la misma se cumplan en ese nuevo entorno.

Por lo tanto, es evidente que los profesionales que queramos trabajar en la transcreación para material de marketing debemos estar al tanto de estas cuestiones para poder cumplir los objetivos de una traducción o edición de calidad y “actualizarnos” para cubrir las necesidades de adaptación de la marca de nuestros clientes.

Nos especializamos en la transcreación de documentos. Para cualquier consulta, no dude en contactar con nosotros.

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